miércoles, 10 de febrero de 2010

Psicocardiología: Cuando el corazón nos habla

Ma. Agustina Viñuela.Licenciada en Psicología. Mat 1071

Según datos aportados por la OMS, las enfermedades cardíacas son la primer causa de muerte por enfermedades crónicas en nuestro país y en el mundo. Se estima que el índice de mortalidad seguirá creciendo por los próximos 30 años. Pero pese a tales datos, las enfermedades cardíacas son consideradas enfermedades del estilo de vida. Lo bueno es que este estilo puede ser modificado y mejorado mediante el cambio de conductas poco saludables por otras favorecedoras de la salud cardíaca. Estas enfermedades se consideran como enfermedades del estilo de vida por estar íntimamente vinculadas con variables como: la alimentación, la actividad física, el consumo de tabaco, el estrés, la depresión, la hipertensión arterial, la diabetes y demás. La Psicocardiología o Psicología Cardíaca es una disciplina que se desarrolla dentro del campo de la Psicología de la Salud. Este nuevo campo disciplinar se conforma mediante la construcción de puentes entre psicología y medicina, por tanto, médicos y psicólogos especializados son quienes se dedican a su desarrollo. Su objeto de estudio y atención son personas (niños y adultos) que padecen o han padecido enfermedades cardíacas como infarto, o que han pasado por una operación de corazón o van a serlo.
El psicocardiólogo se ocupa de trabajar con el paciente aquellos aspectos psicológicos relacionados a la enfermedad, entendiendo que existen determinados factores que participan en la aparición, desarrollo, persistencia y rehabilitación de la enfermedad.
Desde hace mucho tiempo la ciencia reconoce relaciones vinculares y estrechas entre las emociones y las enfermedades. No sólo los eventos coronarios agudos sino el cáncer, las enfermedades pulmonares, las alergias, etc. son explicadas desde variables psicosociales y biomédicas. Numerosas investigaciones en el campo de la salud han demostrado que las emociones y el estado psíquico de las personas se encuentra íntimamente relacionado con la calidad y la salud de las arterias y el corazón. Por ejemplo, se demostró que no sólo la formación sino el desarrollo de placas de ateromas y su posible ruptura se encuentran íntimamente relacionados con variables psicosociales. Los infartos, los dolores de pecho, las arritmias no sólo son señales de que nuestro corazón como bomba que impulsa y distribuye la sangre por todo nuestro organismo funciona mal, sino que hay cuestiones de nuestra vida, de nuestra historia, de nuestros vínculos, pensamientos y emociones que necesitamos repensar, pues el corazón nos da mensajes, nos “comunica” que algo nos está pasando. El estrés, la depresión, las emociones negativas como la ira y la hostilidad son algunos de los “gatillos” que disparan en nuestro sistema cardíaco un sinnúmero de respuestas orgánicas que favorecen la aparición de la enfermedad. El poder detectarlos, modificarlos y reemplazarlos por conductas más sanas depende de la puesta en marcha de nuestra necesidad real de cambio. El poder recuperarse óptimamente de una intervención quirúrgica y comenzar con una vida diferente permite no sólo reducir recaídas sino mejorar la calidad de nuestra vida en general. El poner en palabras lo que nos angustia, evitando que se convierta en síntoma y enfermedad. El aprender a reducir la hipertensión arterial mediante técnicas de respiración y relajación muscular, el poder aprender a comunicar nuestras emociones negativas de manera asertiva, el incorporar hábitos saludables, es un ejercicio diario y continuado que puede aprenderse mediante un trabajo psicocardiológico. Nuestro corazón es nuestra fuente de energía, de vida, es donde nuestras emociones se sienten y es lo que nos permite movernos, sentir y vivir en este mundo, es la paleta de pintor con la cual pintamos nuestra vida….el cuidarlo depende sólo de cada uno.

Bibliografía consultada:
Branon, L., & Feist, J. (2001). Psicología de la Salud. Madrid: Paraninfo Thomson Learning.
Laham, M. (2001). Psicocardiología. Abordaje psicológico al paciente cardíaco. Buenos Aires: Lumiere.
Tajer, C. (2008). El corazón enfermo. Buenos Aires: Libros del Zorzal.
WHO. (s.f.). Cardiovascular diseases: WHO. Recuperado el 20 de Octubre de 2008, de World Health Organization:
http://www.who.int/cardiovascular_diseases/en/


No hay comentarios:

Publicar un comentario